Una planta conforme su desarrollo va adquiriendo características que la ayudan a sostenerse, y una de ellas es el tallo, el cual crece en contra de la gravedad. En el tallo se pueden desarrollar hojas y flores, incluso frutos, es la parte de la planta que llevará todo lo que la raíz absorva hacia diferentes puntos de la misma, distribuyendo los nutrientes que la planta utiliza en su fotosíntesis, el peciolo es el pequeño tronco que sostiene la hoja, y así sucesivamente, todas sus partes contribuyen al crecimiento de la planta.
Los tallos son distintos, hay unos gruesos, otros delgados, fuertes, déviles y así sucesivamente, pero todos realizan una parte importante para la planta, sin los tallos, las plantas no tendrían un sostenimiento y no podrían captar los nutrientes que necesitan. Aunque el crecimiento y dirección de una planta varían: si no hay mucha luz, el tallo buscará la luz, ya sea inclinándose o creciendo de forma recta, si no hay muchos nutrientes, el tallo no crecerá demasiado por lo tanto, la planta no se desarrollará bien.
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